En la foto en la que salen ambas tendencias politizadas del movimiento skinhead, la denominada izquierda, está representada con un nuevo movimiento ruso, apodado como nacional-comunismo. Estos son jóvenes ultranacionalistas que pretenden limpiar rusia de extranjeros, manteniendo los símbolos de la URSS (oz y martillo).
Todo aquel que tenga una mínimas nociones de política, historia o algo por el estilo, puede reconocer a la oz y el martillo del brazalete con los mismos colores en los que la cruz gamada nazi alemana aparecía en sus orígenes en el tercer reich.
Estoy de acuerdo con que no se debe politizar el movimiento skinhead, pero para los que somos hijos de las tierras azotadas por el nazismo, el fascismo o el franquismo, los que somos herederos del estigma de nuestros abuelos que perdieron una guerra en la que defendían a la clase obrera, no podemos olvidarnos de que el enemigo, seas skin, punk, mod, rockabilly, rudeboy o un simple meapilas, es el fascismo. Podría decirse que es algo genético.
Por supuesto que a nivel individual cada cual puede llevar a la práctica sus doctrinas ideológicas, pero a nivel colectivo, como grupo, los skins son skins y punto.
Por otro lado creo, ya para acabar, que nunca nadie, ni individuo ni colectivo, ha podido sobrevivir a base de referencias del pasado. El 69 queda muy lejos, recordarlo está muy bien, quizá nunca se debiera olvidar, pero para mí, el gran reto de los skinheads es mantener aquel espíritu incorporando algo de los tiempos modernos. Un gran reto que si no se lleva a cabo, puede dar como resultado una nueva generación (o degeneración) de skinheads sin principios, valores o que ni conocen a Laurel, Alton o Derrick...
En la foto en la que salen ambas tendencias politizadas del movimiento skinhead, la denominada izquierda, está representada con un nuevo movimiento ruso, apodado como nacional-comunismo.
ResponderEliminarEstos son jóvenes ultranacionalistas que pretenden limpiar rusia de extranjeros, manteniendo los símbolos de la URSS (oz y martillo).
Todo aquel que tenga una mínimas nociones de política, historia o algo por el estilo, puede reconocer a la oz y el martillo del brazalete con los mismos colores en los que la cruz gamada nazi alemana aparecía en sus orígenes en el tercer reich.
Estoy de acuerdo con que no se debe politizar el movimiento skinhead, pero para los que somos hijos de las tierras azotadas por el nazismo, el fascismo o el franquismo, los que somos herederos del estigma de nuestros abuelos que perdieron una guerra en la que defendían a la clase obrera, no podemos olvidarnos de que el enemigo, seas skin, punk, mod, rockabilly, rudeboy o un simple meapilas, es el fascismo. Podría decirse que es algo genético.
Por supuesto que a nivel individual cada cual puede llevar a la práctica sus doctrinas ideológicas, pero a nivel colectivo, como grupo, los skins son skins y punto.
Por otro lado creo, ya para acabar, que nunca nadie, ni individuo ni colectivo, ha podido sobrevivir a base de referencias del pasado. El 69 queda muy lejos, recordarlo está muy bien, quizá nunca se debiera olvidar, pero para mí, el gran reto de los skinheads es mantener aquel espíritu incorporando algo de los tiempos modernos. Un gran reto que si no se lleva a cabo, puede dar como resultado una nueva generación (o degeneración) de skinheads sin principios, valores o que ni conocen a Laurel, Alton o Derrick...
Y de esos, por desgracia, ya tenemos muchos...
Un saludo.
Viva la Working!